El otro día, después de correr por la Costanera, y descubrir caminos nuevos por el parque, y hasta un sitio muy romántico, de esos que te hacen sentir solo (a), decidimos tirarnos un rato en el césped, a descansar y disfrutar un rato del buen clima y el bonito paisaje.. con las piernas dobladas y los brazos abiertos.. sentí el viento acariciando mi cara y despeinar mi cabello.. después de reflexionar sobre la vida, cosa que se da fácil, una vez que uno cierra los oídos y abre bien los ojos..
observando las copas de los arboles, y sus ramas meciendose de un lado a otro, se me ocurre medir al árbol frente a mi.. veinte metros! fue mi primer calculo, después lo mido meticulosamente, recorro su tronco, midiendo por secciones.. lo hago varias veces para estar segura: cincuenta metros el tronco, setenta si tomamos en cuenta su ramificacion mas gruesa y larga.. quedo satisfecha con mi ultimo calculo. No se porque me lleno de información inútil (como diría mi padre) o cosas sin utilidad aparente, solía coleccionar todo tipo de cosas y pedazos de cosas, que podría utilizar "algún día".. ahora veo que no tiene sentido, pero me siguen fascinando los pequeños detalles que muchas personas no ven a veces.. y no me gusta quedarme sin respuesta a preguntas que formulo, aunque carezcan de utilidad practica, o sean solo cálculos sin ningún valor real como en el caso del árbol.. hay arboles tan lindos en esta ciudad, me he enamorado de los arboles morados.. y me agrada caminar por debajo de los naranjos, que despiden un ligero pero delicioso aroma que provoca treparlos para robarse una naranja.. hace mucho tiempo que no tenia la oportunidad de apreciar los alrededores, detenerme a sentirlo todo, escuchar, ver, probar, me gusta también observar el comportamiento de la gente e imaginar sus diálogos.. creo que en cualquier ciudad, cuando es nuestra, cuando nos dejamos atrapar por la rutina, el trabajo, y las a veces complicadas relaciones con otros.. no nos detenemos a observar, perdemos la capacidad de asombro que tienen los niños, vivimos la vida apurados por crecer y después lamentandonos por no poder ser chicos de nuevo, sin "preocupaciones".. extraño trabajar con niños, que eran mi diario recordatorio de la inocencia que no quiero perder, de la esperanza que no quiero que pierda el mundo.. fuentes puras de amor y alegría, promesas para un futuro mejor, que los adultos nos encargamos de deformar, en fin, ya no se mas de lo que estoy hablando.. de pronto recordé los pendientes de mañana.. y me he dado cuenta que de nuevo pasan de las cuatro de la madrugada, ya casi cinco y sigo en vela, me voy.. hasta la próxima..
viernes, 5 de septiembre de 2008
Insomnio..
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4 comentarios:
La vida moderna y sus "comodidades" te impulsan a ser un robot y actuar como un ser frío y desalmado.
Ya que estás viendo que clases tomar, si querés salir un poco del frenesí de apuros y disfrutar del río, te recomiendo ir a la escuela de canotaje del puerto (ECENAA), y anotarte en el próximo curso. Una vez que empezás, tu cabeza cambia muchísimo.
Habla con Eduardo o Lucas, que están todos los días desde las 3 de la tarde.
Saludos!
Saludos Cheryl, ojalá pueda visitar tu ciudad alguna vez y salir del ruido y el smog de Bs As. Sobre el insomnio ... bueno, yo trabajo de noche de Jueves a Domingo, en una Disco importante de Bs As, de Lunes a Miércoles de día y de noche insomnio ya que tengo el sueño cambiado. Métodos: los mismos que vos, leer, tele, café o vino, compu, y ya se aproxima nuevamente el sol. Nos seguimos contactando, saludos y Cariños !!!! Como me gustan tus relatos ... a mi no me salen tan larjos, ja, ja, pero están buenos !!!! Hasta la próxima !!!!
Q tipo de arbol es ese?, es una araucaria? esta chido.
Dicen q poner una lechuga bajo tu almohada ayuda a dormir
cheryl! di la verdad! recuerda bien a esos niños! no siempre eran asi de tiernos como los recuerdas, eran unos diablillos!
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