viernes, 19 de septiembre de 2008

Mendoza.. vino, nieve y mas vino

Improvisamos un viaje express a Mendoza, al noreste de Argentina, cerca de la Coordillera, para aprovechar la ultima nevada; como cinco peliculas (en su mayoria de accion :P), casi un libro entero y 14 hrs de suenio entrecortado en bus, pasaron antes de poder ver las primeras montanias nevadas.. los paisajes se tornaron aridos y empezaron a aparecer los primeros arboles sin hojas, blancos y delgados, como estirados hacia arriba.. parecian estar pintados, nos seguiamos aproximando a nuestro destino y habia cada vez menos vegetacion y mas montanias, finalmente llegamos a Mendoza por la noche e hicimos la unica cosa posible, comer e ir por un trago :P, fuimos al que nos dijeron es "el mejor lugar de pizzas de Mendoza" donde probamos pizzas buenisimas acompaniadas de cerveza obscura, la mejor pizza napolitana que he probado hasta hoy.. despues fuimos a un bar-boliche, donde nos toco ver un juego de futbol, despues un grupo en vivo muy bueno y musica para bailar y cantar, debo decir que ha sido la mejor mezcla musical que he escuchado en Argentina hasta ahora he hizo del lugar una muy buena opcion, el ambiente era excelente, lo pasamos muy bien hasta que el cansancio del viaje nos derroto y fuimos a recuperar las energias al hostel. Nunca me habia quedado dormida tan rapidamente, apenas senti el calor de las cobijas extras, cai rendida hasta horas mas tarde, pues la ruta del vino nos esperaba. Decidimos recorrer los viniedos en un viaje en bicicleta, fue divertido volver a subirme a una despues de no se cuanto tiempo, recordar viejos tiempos y recorrer nuevos y bonitos caminos en busca de vino.. fuimos al museo del vino donde nos explicaron la historia, enseniaron antiguedades y dieron a degustar nuestro primer vino de la tarde.. un delicioso malbec.. seguimos pedaleando hasta una casa donde elaboran licores dulces y chocolate, probamos unos licores muy buenos, algunos demasiado fuertes y unos chocolates riquisimos, queria comprar todo el lugar para comermelo! jeje, licores, chocolates, salsas y mermeladas, de los dulces mas deliciosos y sus combinaciones, muy rico.. despues el apetito nos llevo a un pequenio restaurant muy rustico y acogedor, donde compartimos unos nioquis caseros y yo probe las empanadas locales, y por supuesto, mas vino! ..al momento de regresar las bicicletas, los duenios del negocio nos invitaron una copa de vino, conversamos sobre nuestros diferentes paises (entre nosotros Espania, Brasil y Mexico) y yo me separe un momento del grupo para descansar en una hamaca mientras el perro de la familia trataba de lamerme, jeje.. nos despedimos y fuimos a prepararnos para nuestro siguiente dia, un dia de esqui en las montanias! como buena mexicana :P logre negociar los precios del equipo completo de esqui para todos con un importante descuento, jeje.. en fin, nos entusiasmamos y cargamos nuestros palos de esqui, vistiendo trajes de kill bill, soniando con esquiar.. el bus que nos llevaba de Mendoza a las montanias salia a las 7 am, madrugamos y a las 6:20 a.m. estuvimos ahi.. desgraciadamente hubo una confusion con los horarios y el bus ya habia salido a las 6 am, el siguiente salia muchas hras mas tarde y de camino eran casi 4 hrs, asi que ya no ibamos a alcanzar a esquiar casi, en ese momento el animo decayo y empezamos a considerar la idea de regresar los equipos y abandonar el plan, pero despues de analizar las opciones, decidimos sacrificar el esqui y aprovechar mejor el tiempo llendo un poco mas lejos, para visitar el Parque Aconcagua y el Puente del Inca, dejamos los equipos ya que casi no alcanzariamos a aprovecharlos y nuestro plan B requeria caminar sobre la nieve mas de 4 km, y con esa carga no seria posible.. hicimos tiempo y tomamos el bus, tratando de recuperarnos de la desilusion, sin embargo mientras avanzabamos y las enormes montanias nevadas se abrian ante nosotros, supe que el viaje ya habia valido la pena.. un panorama de montanias imponentes que te hacen sentir pequenito nos rodeaba.. llegamos al parque, sorpresa! no habia banios, el unico disponible estaba congelado! jeje.. cuando supe esto deje de tomar liquidos, sin embargo mis companier@s de viaje no tuvieron tanta suerte y tuvieron que dejar sus inhibiciones de lado por necesidad y hacer un acercamiento con la naturaleza :P haha.. casi de inmediato nuestras botas no aptas para la nieve se mojaron a pesar de las bolsas de plastico que nos regalaron a la entrada que se rompieron en los primeros metros, yo tuve la fortuna de contar con las botas de un companiero que si trajo su equipo de snowboard y me las presto, y aunque me costaba mayor trabajo movilizarme, no moje mis pies.. en cambio mis companieras arrastraron sus pies frios y mojados casi todo el camino.. mientras avanzabamos pedazos de carretera enterrada bajo la nieve aparecian de pronto frente a nosotros, senialamientos viales enterrados bajo la nieve.. los lagos que fuimos a ver, tambien estaban bajo la nieve.. de pronto pareciamos sobrevivientes de alguna tragedia abandonados en los Andes.. no habia nada, mas nieve y mas montanias.. alla afuera en la nieve, escuchas el silencio mas puro.. la ausencia de todo, volteas a todos lados y no hay nada ni nadie.. es una experiencia increible.. el paisaje te impacta y te reduce a un pequenio punto negro entre tanta nieve, caminamos un rato y tratamos de hacer snowboard otro, fui la primera, despues de lanzar un grito al aire me cai como habia previsto, pero fue divertido, aunque sea cubrio mi tentacion de deslizarme por la nieve, como algun dia lo hare con palos de esqui.. me tire en la nieve, que sorprendentemente no es tan fria y hasta calor te da el sol y su reflejo en ella, ademas del esfuerzo de caminar y respirar, a otra altura y temperatura diferentes a las acostumbradas, nos tiramos bolas de nieve un rato.. caminamos de regreso, siguiente parada, el Puente del Inca.. ahi encontramos puestos de curiosidades a la venta, comida, etc, cuyos vendedores tuvieron la amabilidad de platicarnos la "verdadera" historia y despertar nuestra curiosidad al respecto.. ya no se puede cruzar el puente pero pudimos observarlo y probar la comida local; yo pedi un guiso con lentejas, que alla es lo mas comun, con carne, arroz, queso, etc.. que estaba muy rico.. ademas he comido pocos caldos durante esta experiencia y uno muy bueno y calientito en la nieve fue una muy buena desicion.. la comida fue un buen cierre para terminar el dia en la nieve y regresar nuevamente varias horas en bus hacia Mendoza.. en la noche fuimos a un bar revestido de maderas y con un toque de mexicanidad, el ambiente muy agradable y con buena musica.. comimos muy rico, comidas con supuesto picante que nunca llego, pero llenas de sabor, y brindamos por nuestra ultima noche en Mendoza, ciudad que nos brindo buena comida, excelente vino y hermosos paisajes nevados.. salud!